Grandes cosas distinguen a nuestro país como un lugar lleno de magia, algarabía y esplendor, pero hay un día que nos llena de júbilo y gran orgullo, el 21 de septiembre de 1933 día en que llegó a México la Lucha Libre, deporte que nos ha llenado de grandes momentos, eventos que nos han hecho llorar de alegría y tristeza y, que sin duda nos ha dejado a aquellos héroes de carne y hueso que nos hacen creer que éstos pueden volar, pues cada lance, tope y vuelo está lleno de sueños, sueños que estos héroes tuvieron de niños y hoy ven su sueños hechos realidad.
Fue en el año 2016 cuando la propuesta de reconocer a la Lucha Libre como patrimonio cultural se presentó al Senado, tres años tuvieron que pasar para que de manera oficial se firmará el decreto con más de 300 votos a favor. Así en 2019 fue nombrada Patrimonio Cultural Intangible de la Ciudad de México, decretando el 21 de septiembre como Día Nacional de la Lucha Libre y del Luchador Profesional Mexicano.
Gracias a este reconocimiento podemos celebrar el deporte de los costalazos, donde el Luchador y las Amazonas nos hacen vibrar de emoción.
