Empezando este inicio de semana con estos deliciosos chiles rellenos.

Los chiles rellenos son un platillo mexicano que consiste en piezas enteras de chile, asadas directamente en la lumbre o usando un comal, para poder pelarlos y retirarles las semillas con facilidad y rellenarlos con alimentos, usualmente cárnicos, a las que se les envuelve en una capa de huevo batido y se les fríe.

 En algunas partes de México especialmente cuando se rellenan de atún y se consumen fríos, no se capean con huevo, ni se fríen y se les llama chiles capones.

Los chiles rellenos se consideran platillo principal y se suelen servir con una salsa de jitomate y cebolla condimentada con orégano, se acostumbra acompañarlos con arroz blanco o a la mexicana cocinado con puré de jitomate, lo que le da un color rojo.

La variedad de chile es relevante, debido a que se requiere que las jaras sean de una talla consecuente para poder contener alimento, ya que por tradición no se utilizan variedades de chile demasiado picantes.

Los chiles más utilizados para rellenar son los chiles frescos. Aunque hay quienes utilizan chile huachinango o pimientos morrones.

Existen muchas variedades de relleno para los chiles, siendo las más populares el puré de papa con atún, los quesos para fundir y los guisos de carne molida.

Los chiles rellenos más populares en México llevan picadillo carne condimentada de res, de cerdo o una mezcla de ambas con verduras picadas finamente, queso y atún mezclado con zanahoria y chícharos.

Los chiles en nogada son una variedad particular de chiles rellenos y bañados en una salsa de nuez de Castilla fresca, de ahí el nombre de nogada.

Estos chiles rellenos vienen siendo hechos desde hace mucho tiempo por familias mexicanas, es una de las tradiciones que forman la cocina mexicana, y que sigue siendo muy popular en todo México.

 Cada familia tiene su manera diferente de prepararlos, debido a esto en cada estado en México en general el platillo sabrá diferente, ya que cada jara contribuye con un sazón distinto a los demás, en la actualidad es uno de los platillos de más uso en la cocina mexicana.