Los observadores de estrellas de todo el mundo tendrán la oportunidad de ver una luna de sangre durante el fin de semana cuando un eclipse lunar se mueva hacia la órbita de la Tierra.

Se espera que el eclipse penumbral, cuando la Luna se sumerge por completo en el cono penumbral de la Tierra sin tocar la umbra, la parte interna de la sombra de la Tierra, comience el domingo poco después de las 9:30 p.m. ET, según la NASA, el eclipse penumbral provoca que solo una parte de la luna se oscurezca.

El eclipse parcial, cuando la luna parece moverse hacia la umbra y parte de la luna dentro de la umbra aparecerá muy oscura, ocurrirá justo antes de las 10:30 p.m. ET.

La totalidad comenzará justo antes de las 23:30 horas. ET, cuando toda la luna está dentro de la umbra de la Tierra y se transforma en un tono rojo cobrizo, la totalidad terminará antes de la 1 a. m. del lunes, y el eclipse penumbral finalizará a las 2:50 a. m.

Los residentes de la mitad este de los EE. UU. y toda América del Sur podrán observar cada etapa del eclipse lunar, y la totalidad será visible en gran parte de África, Europa occidental, América Central y del Sur y la mayor parte de América del Norte, según NASA.

Un ambiente oscuro lejos de las luces brillantes creará las mejores condiciones de visualización.

El eclipse lunar ocurre cuando el sol, la Tierra y la luna se alinean, y la luna pasa a la sombra de la Tierra, según la NASA, luna de sangre es el término para describir la parte del eclipse lunar total en la que todos los amaneceres y atardeceres de la Tierra se proyectan sobre la superficie de la luna a medida que pasa a través de la sombra de la Tierra, oscureciendo y dándole su color carmesí.

La dispersión de Rayleigh, el mismo fenómeno que le da al cielo su color azul y hace que las puestas de sol sean rojas, es lo que hace que la luna se vuelve roja durante el eclipse, la luz roja, que tiene longitudes de onda más largas que la luz azul, se ve durante un eclipse lunar porque la única luz solar que llega a la luna pasa a través de la atmósfera terrestre, según la NASA.