Las bebidas con cacao permean en los estados del Pacífico y Guerrero no podía quedarse atrás, pero éstas tienen una peculiaridad, el chilate utiliza arroz como espesante a diferencia del tejate oaxaqueño o el tascalate chiapaneco.
El mestizaje cultural de la Nao de China en la época de la Colonia hizo de las suyas y ese cereal que llegó a nuestro territorio conquistó el corazón de varios, el arroz es uno de los ingredientes clave de la cocina guerrerense y recibe un trato similar al maíz.
En el chilate se combina piloncillo que en esta latitud se conoce como panela, cacao silvestre de la costa grande, arroz y canela, todos los ingredientes se deben moler en metate e irlos hidratando poco a poco.
Encontrarás chilate en puestos por la carretera o las mismas ciudades de las costas, en ollas de barro se está moviendo constantemente para que no se asiente y se escancea con una jícara, entre más espuma produzca al servirlo, más cacao tiene y es un indicio de que está bueno.
No sólo de mariscos viven en las costas guerrerenses, de hecho, muchos lugares ya no se dedican a la pesca por la escasez de producto, a diferencia de los mares, la sierra y el suelo siguen dando ganado y vegetales increíbles que hacen comidas de campeones.