Es una deidad mexica, quien se considera es la representación de la luna, dado que no presenta ningún signo o glifo lunar, se ha propuesto que representa otro tipo de cuerpo celeste.
En la mitología nahua, Coyolxauhqui era hija de la diosa madre Coatlicue y hermana y líder de los dioses de estrellas Centzon Huitznáhuac.
Los estudiosos también opinan que la decapitación y el desmembramiento de Coyolxauhqui se reflejan en el patrón de los sacrificios rituales de los guerreros, estos consistían, en primer lugar, en extraer los corazones de los cautivos del pecho, en ser decapitados y desmembrados.
Su ubicación original recrea el mito, pues se situaba en la parte frontal del Templo Mayor, en el edificio dedicado a Huitzilopochtli, de la antigua Tenochtitlan, igual que en el cerro de Coatepec.