El traje de Tiliche está hecho de pedazos remendados de tela, que imita la ropa de un campesino cuya vestimenta ya se ha deteriorado por el trabajo, portan máscaras de viejito hechas de paja y estropajo, que representan el cansancio de los peones, combinado con los joviales y graciosos danzares de quienes portan el traje.
Un pantalón y una camisa grandes hechos con pequeños retazos de tela rectangular también llamados tiliches cosidos de par en par uno encima de otro, de esta forma se obtiene un traje de tiliche enorme, con mucho volumen, de colores tan variados como la imaginación del que lo porta, lo primordial al elaborar este traje, que los tiliches sean capaces de flotar en el aire al ritmo de la música del carnaval.
A los tiliches también se les conoce como viejos o marmanos, que es una contracción de la frase “Mi hermano”.
Otro origen de esta vestimenta es el robo de ganado que algunos peones cometieron contra sus opresores y cuyo éxito vino acompañado de ropa rasgada.
Los tiliches también son parte de la Guelaguetza, pues el “baile de los viejitos” es un ícono de Oaxaca y sus celebraciones como parte de una de las ferias más importante no solo para el estado, sino también para el resto de México ante los ojos del mundo.